Los estremecedores rugidos (en el buen sentido, si lo hay) de Etta James se configuraron en 1960 en este espléndido álbum. Del dulce susurro al grito desgarrado, la siempre excesiva Etta derrocha fuerza y lirismo en todas estas canciones. He aquí el enlace para descargarlo, tomado de aquí.
Gracias por el disco, lo estoy escuchando.
ResponderEliminarCada semana leo cinco blogs, este es uno de ellos, pero no hay nada, espero seguir leyendo.
ResponderEliminarRecibe un saludo cordial de
GG
Hola, George.
ResponderEliminarAgradezco tu atención y tus comentarios. Procuro editar entradas regularmente para los que os tomáis la molestia de leerme. Sin embargo, en verano tengo ciertos problemas de infraestructura que me hacen más difícil actualizar el blog, lo cual no es excusa para la dejadez el abandono en que lo (os) tengo. Hoy mismo espero tener una entrada ya lista y volver a un ritmo de publicación, si no similar al del resto del año, sí aceptable para los que me leéis.
Gracias por el tirón de orejas.
Un saludo.