miércoles, 26 de mayo de 2010

Jesús histórico

a
"Otro de los libros de Kilgore Trout que estaba en el escaparate trataba de un hombre que construyó una máquina del tiempo para retroceder hasta poder ver a Jesús. La máquina funcionó y vio a Jesús cuando éste tan sólo tenía doce años. Su padre le enseñaba el oficio de carpintero.

Un día, dos soldados romanos entraron en el taller y le mostraron el plano dibujado en papiro de un trabajo que necesitaban a la mañana siguiente. Era una cruz que tenían que utilizar para la ejecución de un rebelde.

Jesús y su padre la construyeron. Estaban contentos de tener trabajo. Y el rebelde fue ejecutado sobre ella.

Así fue".

Kurt Vonnegut, Matadero Cinco

lunes, 24 de mayo de 2010

Negra sombra

a
La cantante Luz Casal se recupera de una segunda operación de cáncer de mama. Como homenaje a esta enorme artista, he aquí el poema de Rosalía de Castro que tan bien versionó.

NEGRA SOMBRA

Cando penso que te fuches,
negra sombra que me asombras,
ó pé dos meus cabezales
tornas facéndome mofa.

Cando maxino que es ida,
no mesmo sol te me amostras,
i eres a estrela que brila,
i eres o vento que zoa.

Si cantan, es ti que cantas,
si choran, es ti que choras,
i es o marmurio do río
i es a noite i es a aurora.

En todo estás e ti es todo,
pra min i en min mesma moras,
nin me abandonarás nunca,
sombra que sempre me asombras.


NEGRA SOMBRA
(versión de Mónica B. Suárez Groba)

Cuando pienso que te fuiste,
negra sombra que me asombras,
a los pies de mis cabezales,
tornas haciéndome mofa.

Cuando imagino que te has ido,
en el mismo sol te me muestras,
y eres la estrella que brilla,
y eres el viento que zumba.

Si cantan, eres tú que cantas,
si lloran, eres tú que lloras,
y eres el murmullo del río
y eres la noche y eres la aurora.

En todo estás y tú eres todo,
para mí y en mí misma moras,
ni me abandonarás nunca,
sombra que siempre me asombras.


jueves, 20 de mayo de 2010

Música para después del diluvio: "Treme"

a
Querido S.:

Para los adictos a The Wire fue una gran noticia saber que su creador, David Simon, se había metido a fondo en un nuevo proyecto tan personal como ambicioso: una reconstrucción de la Nueva Orleans post-Katrina. Unos meses después del paso arrollador del huracán, los habitantes de la ciudad bregan todavía por sanar los destrozos. La catástrofe ha dejado al descubierto la fragilidad de los cimientos sobre los que se asienta la ciudad, gracias a la codicia de políticos y constructores. Las labores de rescate, desescombro y saneamiento parecen no tener fin. En medio de este desastre, la enorme comunidad de músicos de Nueva Orleans se esfuerza en realizar el primer desfile tras el huracán. Así arranca Treme (pronúnciese /tremé/).


La música llena el corazón del primer episodio de Treme (ya van por el sexto, pero aún no he visto más que el primero). De nuevo, Simon elabora una historia con multitud de personajes, explorando en profundidad el tejido social de la ciudad (algunos de los actores son viejos conocidos de The Wire). Aunque se centra en los músicos, también tenemos abogadas, restauradoras, periodistas... Todos luchan por superar el trauma colectivo que supuso la catástrofe ambiental y la evidencia de que el Gobierno Federal les había dejado a su suerte. Y fundamental para ello es la buena salud del inmenso legado musical de Nueva Orleans. Para hacerte una idea te traigo un par de discos magníficos de músicos autóctonos que pueden escucharse en la serie: Allen Toussaint y Kermit Ruffins.




The Bright Mississippi, de Allen Toussaint


Extraordinario pianista de jazz del que pude disfrutar por primera vez, por casualidad, en un programa de la 2 a las tantas de la mañana (no sé si era la retransmisión de un festival de jazz o a lo mejor Los conciertos de Radio 3). Te pongo los enlaces a un disco absolutamnete maravilloso (insisto: no te lo pierdas): en Rapidshare y en Hotfile, tomados de aquí.

Putumayo Presents Kermit Ruffins


Al parecer, el tal Kermit debe ser toda una celebridad en Nueva Orleans aunque poco conocido más allá del Mississippi. En el episodio de Treme que te estoy comentando, nada menos que Elvis Costello (quien, por cierto, colabora en algún disco con Toussaint) se acerca a un local para escuchar la trompeta de Kermit. Y después de escuchar este soberbio disco te das cuenta de que no es para menos. En esta página lo puedes descargar.

miércoles, 19 de mayo de 2010

El poeta y sus radiaciones

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Pocas trayectorias literarias tan fulgurantes como la de Arthur Rimbaud. A diferencia de la música o el ajedrez, la literatura es un arte "tardío", es decir, un campo en el que la excelencia se alcanza con el paso del tiempo. Por ello, no hay alguien equivalente a Mozart en el mundo de las letras. Hasta la llegada de Rimbaud, quien escribió la totalidad de su obra poética antes de los 20 años. Luego la inspiración parece abandonarle y marcha al entonces poco explorado continente africano, dedicándose al tráfico de armas. La figura inimitable de Rimbaud es objeto de una exposición a cargo del especialista Claude Jeancolas (esperemos que alguna editorial se arriesgue a traducir su biografía del poeta y su Diccionario Rimbaud), quien rastrea la influencia rimbaudiana en el arte posterior.

viernes, 14 de mayo de 2010

Material de lectura

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Querido S.:

La carne es triste y ¡ay! he leído todos los libros, decía Mallarmé. La carne es triste a menudo y en ocasiones gloriosa, y por más que lo intento no he leído todos los libros. Un libro me envía a otro libro que me envía a otro y así hasta el tedio o, a veces, al fulgor de la frase perfectamente cincelada: la fina capa del sonido y la marcha justa de la respiración se funden con el sentido en una unidad fatal y perfecta. A continuación te recomiendo algunos libros con los que merece la pena irse a la cama.

La flecha del tiempo, o La naturaleza de la ofensa
, de Martin Amis



Tod Friendly está muerto. Su cuerpo yace sin vida en la mesa de operaciones de un hospital. Pero una versión supraterrenal de sí mismo (una especie de superyo, en términos freudianos) observa como despierta en la mesa de operaciones, los médicos intervienen su cuerpo sólo para dejarlo hecho una piltrafa, lo sacan en camilla del hospital para meterlo en una ambulancia y llevarlo a lo que parece un accidente... Y es que la vida de Tod empieza a transcurrir marcha atrás, como si hubiese apretado el rewind en una película. El superyo de Tod encaja como puede esa sucesión de acontecimientos contraviniendo la marcha del tiempo: el achacoso cuerpo de anciano de Tod va dando paso a una cuerpo progresivamente más joven y vigoroso, la ausencia de mujeres y de vida sexual va supliéndose poco a poco, mayoritariamente con las enfermeras que trabajan en su hospital (él es médico), misteriosas postales llegan a su casa de un remitente desconocido que, junto a otras señales, indican un turbio pasado... o futuro. El paso del tiempo lleva a Tod (de vuelta) a Europa con una identidad nueva, donde el voraz agujero negro que parece haber marcado toda su vida parece situarse en los laboratorios de un campo de concentración en un remoto pueblo polaco, junto a las chimeneas monstruosas y eficientes de Auschwitz. Amis emprende un extrordinario ejercicio de estilo al narrar la novela hacia atrás, de principio a fin. Este recurso le permite mantener una sarcástica distancia para con los hechos, perfilando un punto de vista muy original.

El hombre desplazado, de Tzvetan Todorov


Todorov emigró de la Hungría comunista a Francia con 24 años. En este libro contrapone el comportamiento de los individuos en una dictadura y en una democracia. En la primera el Estado monopoliza todos los pensamientos, el individuo ha de desarrollar una suerte de doble discurso, uno de cara a la galería con el comportamiento que exige la dictadura, para evitar represalias, y el otro con los verdaderos sentimientos que a menudo, por ser simplemente humanos, van en contra de la ideología oficial. De esa manera, la política lo absorbe todo, el individuo ha de estar en perfecta comunión con el Estado. En la Francia democrática a la que Todorov llegó una fría mañana las cosas son muy distintas. La confrontación de ideas es posible. Se da la singularidad de que la República acoge y permite expresar ideas (dentro de ciertos límites) en desacuerdo con sus principios fundamentales. Lo que en los regímenes comunistas es una paz helada e impuesta a golpe de represión, en democracia resulta una fructífera y civilizada (a veces) discusión. La última parte del libro da cuenta de la experiencia de Todorov como profesor invitado en diversas universidades americanas y sus reflexiones acerca de la vida en los hérméticos campus y de las teorías literarias que han tomado el dsicurso humanístico norteamericano.

Habitaciones. Poema del tiempo que no pasa, de Louis Aragon



Tras haber sobrevivido a varios de los movimientos que convulsionaron el siglo XX, tanto cultural (el surrealismo) como políticamente (el comunismo, al que sirvió de manera miserable y mezquina), Aragon, poco antes de la muerte de su gran amor, Elsa, realiza un descarnado ajuste de cuentas con la realidad y la memoria, componiendo un desolador y deslumbrante poema. La edición corresponde al gran Gabriel Albiac.

Un abrazo,

Á.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Tantas piernas

a
Querido S.:

Leyendo el blog de sexo de El Mundo, Cama redonda, perpetrado por el gran Josep Tomás (el de "con estas manitaaaaas"; ver vídeo infra) me entero de que las piernas consideradas como una de las bellas artes no pasan por un momento de gloria. No sé cómo estará el ranking de fetichismos actualmente (supongo que en la cima estarán, como toda la vida, los pechos y el culo, o yo llevo en coma media vida), aunque, como sugiere Josep, la escualidez del modelo de belleza actual no favorece la ostentación de piernas elegantes y sólidas sino, más bien, el abundamiento de una suerte de apéndices filiformes que apenas sirven para otra cosa que andar.



Los amantes de las piernas admiramos una serie de complementos que nos suliveyan sobremanera pero que, para nuestro eterno pesar, la moda ha ido arrinconando poco a poco (aunque puede que algún diseñador iluminado los vuelva a poner de actualidad, como pasó con los pantalones de campana): las medias y los ligueros. Estas sugerentes prendas, combinadas con los zapatos de tacón un poco alto, estilizaban las piernas, hacían bailar las caderas y, en fin, le daban un explosivo erotismo al andar que ponía a los hombres (y a algunas mujeres) como verracos. Supongo que la aparatosidad de dichas prendas fue relegándolas en favor de ropa más práctica. En mi memoria erótica, su atractivo viene dado por el cine, y yo lo asocio (supongo que por las limitaciones de mi experiencia fílmica) a la Italia de posguerra, llegando hasta los años 60 y posiblemente algo más tarde (aunque ya por entonces la minifalda comenzaba a hacer estragos introduciendo un nuevo paradigma en la mente masculina: el de enseñar cacha, algo que sólo podía verse, previo pago, en las casas de putas). Muy representativo del imaginario erótico de alguien de aquella época es Malena, del almibarado Giuseppe Tornatore, interpretada por la no muy expresiva actriz pero mujerón monumental (características que comparte con las divas italianas de antaño) Monica Bellucci. Atento a la obsesión de Renato (el protagonista) con los muslos de la Bellucci (remarcados por los ligueros).




Aunque no todo está perdido. La belleza femenina resiste ahora y siempre al invasor en forma de pantalón ancho o de dietas salvajes, y encontramos mujeres con unas piernas tan espectaculares como las de la cantante Rihanna o las interminables de Pilar Rubio.



Josep Tomás inclye en su cometario una canción de ZZTop que yo no conocía (no te pierdas el vídeo de Carmen Electra bailándola), así que no quiero ser menos y también incrusto aquí una canción: la mítica Hot Legs, de Rod Stewart. Con eso y un fragmento del Poema de Siete Faces, de Carlos Drummond de Andrade, te dejo.



El tranvía pasa lleno de piernas:
piernas blancas negras amarillas.
Para qué tantas piernas, Dios mío, pregunta
mi corazón.
Sin embargo mis ojos
no preguntan nada.

martes, 11 de mayo de 2010

Locura y amor

a
Querido S.:

En el enrarecido ambiente de entreguerras maduraron numerosas iniciativas artísticas perseguidoras de cambios radicales en la vida, el mundo y lo que cuadrase. El fin de siglo dejaba en la orilla toda suerte de malditismos, afectaciones, esoterismos y perversiones, además de un explosivo mejunje de nacionalismo, antisemitismo, ardor guerrero y retórica hinchada que los líderes musulmanes de hoy parecen copiar letra por letra. En esta Europa a punto de estallar surgieron joyas como la literatura de la decadencia austro-húngara, las vanguardias históricas y, dentro de éstas, una piedra extraña y fascinante: el surrealismo. Podemos encontrar un completo recorrido por este movimiento en un apasionante libro del poeta Antonio Martínez Sarrión: Sueños que no compra el dinero (Balance y nombres del surrealismo).


El nacimiento del surrealismo puede hallarse bajo las bombas de la Gran Guerra: los poetas André Breton y Louis Aragon, médicos auxiliares, leen las delirantes páginas de Los cantos de Maldoror, del misterioso Lautréamont, con los aullidos de los dementes de fondo. La vitriólica mezcla de poesía, delirio y crimen les impulsa a buscar las fuentes de la poesía lejos del arsenal de figuras gastadas: en los manicomios, los sueños, la embriaguez, el azar, en todo aquello que se aleje de la razón cartesiana. El objetivo es la conciliación de los opuestos, el vislumbre de la unidad indivisa. A tal grandioso fin, ambos poetas, acompañados de numerosos compinches que irán cambiando con el tiempo, se valdrán de infinidad de métodos, desde la poesía automática al hipnotismo.

El surrealismo se nutrió de movimientos, como el Dadá, cuya primera función de cara a la galería era épater le bourgeois. De ahí surgen gran cantidad de desplantes y numeritos propios de una mezcla de adolescente y dandi con el fin de marcar distancias entre la sociedad y el artista. Breton es el gran pope del movimiento, redactor de los manifiestos del grupo, impulsor de revistas y, debido a su talante un tanto policial, censor de los diversos integrantes del grupo para que cumpliesen los principios del surrealismo de manera ortodoxa. Muchos se perdieron en esta criba, ya fuese por veleidades religiosas (Breton hizo caer de su panteón a Rimbaud cuando alguien publicó un artículo sobre la influencia del catolicismo en el joven poeta) o, sobre todo, por la adhesión al Partido Comunista (otro tipo de veleidad religiosa, como se sabe). Martínez Sarrión analiza las diversas fases del movimiento, desde el empuje inicial con sede en París hasta la dispersión posterior, cuyo fin el autor hace coincidir con la muerte de Breton en 1966.

Más allá de las miserias grupales, el surrealismo dejó una serie de obras, tanto en poesía como en cine (Buñuel) o en pintura (Dalí, Miró) que todavía hoy conservan una fuerza interior salvaje y turbadora. Al final del libro, Martínez Sarrión incluye un diccionario biográfico con todos los nombres que tuvieron parte en el movimiento. Por mi parte, te recomiendo unos pocos libros de los que he leído pertenecientes al surrealismo.

René Char: Poesía esencial (Furor y misterio, Los matinales, Aromas cazadores)


Uno de los poetas fundamentales del siglo XX. En Furor y misterio se encuentra el sobrecogedor cuaderno Hojas de Hipnos, diario poético de la participación de Char como capitán en la Resistencia y conjunto de poemas que quitan el habla.

Julien Gracq: El mar de las Sirtes


La prosa de Gracq, de una sintaxis alambicada y enormemente precisa y de una extrañeza metafórica realmente excepcional, tiene pocos rivales dignos en las letras del siglo XX. En esta novela nos narra los avatares de un mundo fabuloso que, como dice Martínez Sarrión en el libro, es "una narración iniciática, de búsqueda y acecho, que ofrece ciertos parentescos con novelas, en esa línea, de Dino Buzzati, Ernst Jünger o Rafael Sánchez Ferlosio".

viernes, 7 de mayo de 2010

Bodegón

a
La relación primaria de un ser humano con un animal es siempre la de depredador. Una vez aplacada el hambre, el hombre puede permitirse otro tipo de relaciones, como la del uso de animales como bestias de carga o, en un nivel más sutil, como mascota. Es cierto que sólo cubriendo las necesidades básicas puede el hombre dedicarse a filosofar. Esta reflexión me ha venido a la cabeza contemplando el soberbio cuadro de Antonio López, Conejo desollado (1972).


jueves, 6 de mayo de 2010

Hamsterdam: "The Wire" (III)

a
Querido S.:

El escalpelo visual de The Wire sigue diseccionando sin tregua los rincones menos presentables de la ciudad de Baltimore. Desde los agujeros donde malviven los yonquis hasta los elegantes despachos donde se decide el destino de las enormes cantidades de dinero que mueven la ciudad. La inteligencia narrativa de David Simon y Ed Burns consigue mostrárnoslo todo ligado por lazos a veces evidentes, otras sutiles, pero siempre como un todo orgánico donde cualquier acción provoca una reacción igual y opuesta.


Los jefes de la policía de Baltimore están preocupados porque las estadísticas de criminalidad aumentan. Ello también molesta en el Ayuntamiento porque les coloca en mal lugar respecto a la opinión pública y el gobierno federal. Por tanto, los jefes presionan a sus subordinados para que le echen imaginación y hagan descender las estadísticas. Éste va a ser un leit-motiv recurrente en las siguientes temporadas: la preocupación por las estadísticas y la necesidad de rebajarlas por el método que sea necesario (generalmente, maquillándolas). Pero para reducir la tasa de crímenes hacen falta más hombres, más patrullas, más horas extra... en una palabra, más dinero. Que es de lo que el Ayuntamiento no quiere ni oír hablar. Y así se cierra el círculo vicioso.


Pero uno de los jefes, el Comandante Colvin, a punto de jubilarse, tiene una idea. En lugar de tener a los vendedores de droga dispersos por varios barrios y calles, creando inseguridad en todos ellos, ¿por qué no concentrarlos en zonas bastante despobladas donde puedan vender libremente sin molestar al ciudadano de a pie? Así pues, Colvin lo organiza todo sin informar a sus superiores. Los traficantes llaman a las zonas libres Hamsterdam (con la h aspirada) como una broma por la tolerancia a las drogas que se practica allí. Colvin transforma un problema mayor de inseguridad ciudadana en un pequeño asunto de salud pública. Pero el sueño no dura. Los superiores de Colvin en la jefatura de policía y en el Ayuntamiento, además de la prensa, se enteran de esta pequeña legalización de las drogas. No tardarán en buscar culpables.




Además de toda esta trama que vertebra toda la tercera temporada, volvemos a encontrar a los antiguos personajes, además de a otros nuevos, metidos en sus asuntos. McNulty, Freamon y compañía siguen con las escuchas para intentar desmontar lo que queda del entramado de Avon Barksdale. Con éste en la cárcel, Stringer Bell dirige el cotarro y toma decisiones a veces en contra del criterio de Avon. Su objetivo es desviar el dinero de negocios sucios (la droga) a otros más respetables (la construcción). Intenta quitarse el olor de las calles, como decían en Érase una vez en América. Además, un nuevo gángster asciende con fuerza para hacerse con el control del negocio del narcotráfico: Marlo Stanfield. Por otro lado, vemos las dificultades de un "soldado" (un pistolero a sueldo) para reformarse: Cutty, quien ha cumplido condena por asesinar para el clan Barksdale, sale de la cárcel y se enfrenta a la encrucijada de volver a matar o tener que reintegrarse arduamente a la sociedad.


En esta temporada aparece un personaje que tendrá mucha importancia en las temporadas posteriores: el concejal Thomas Carcetti, un ambicioso político con mucho que decir. Y, por supuesto, quien tiene mucho que decir es el impagable Omar Little, el pistolero homosexual que roba y mata a los traficantes. Un asunto pendiente con el hermano Mouzone le hará empuñar la recortada. En fin, seguimos con las mismas: realismo, diálogos ceñidos al habla callejera o a la jerga plagada de eufemismos de los políticos, certera caracterización de los personajes... Una maravilla. No quiero terminar este post sin mencionar la impresionante escena del velatorio de un policía: en una taberna irlandesa, sus compañeros tienden el cadáver en la mesa de billar, con una copa en una mano y un puro en la otra, mientras se emborrachan y cantan The Body of an American, de The Pogues, grupo de borrachos irlandeses que cantan canciones de borrachos y que he descubierto gracias a The Wire. Otra virtud más. Con esta tierna escena, te dejo.



Un abrazo,

Á.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Piano, piano

a
Llevo tiempo queriendo dedicarle una pequeña sección a mi instrumento musical favorito, a saber: el piano. Pero como no sé nada de solfeo, partituras, digitación, ni nada que se le parezca, hablaré de algunos pianistas que me suliveyan, ya sean de jazz (pienso en Keith Jarrett, Bill Evans, Oscar Peterson...), de música clásica (Friedrich Gulda, Sviatoslav Richter, Martha Argerich...) o de lo que se me ocurra. Mientras preparo el primer post, te pongo este vídeo del insuperable Tom Waits donde demuestra el profundo hermanamiento que mantiene con su piano: The Piano Has Been Drinking (Not Me). La traducción la he tomado de aquí.






The piano has been drinking
(Not Me)


The piano has been drinking

My necktie's asleep
The combo went back to New York, and left me all alone
The jukebox has to take a leak
Have you noticed that the carpet needs a haircut?
And the spotlight looks just like a prison break
And the telephone's out of cigarettes
As usual the balcony's on the make
And the piano has been drinking, heavily
The piano has been drinking
And he's on the hard stuff tonight

The piano has been drinking
And you can't find your waitress
Even with the Geiger counter
And I guarantee you that she will hate you
From the bottom of her glass
And all of your friends remind you
That you just can't get served without her
The piano has been drinking

The piano has been drinking
And the lightman's blind in one eye
And he can't see out of the other
And the piano-tuner's got a hearing aid
And he showed up with his mother
And the piano has been drinking
Without fear of contradiction I say
The piano has been drinking

Our Father who art in ?
Hallowed by thy glass
Thy kindom come, thy will be done
On Earth as it is in the lounges
Give us this day our daily splash
Forgive us our hangovers
As we forgive all those who continue to hangover against us
And lead us not into temptation
But deliver from evil and someone you must all ride home

Because the piano has been drinking
And he's your friend not mine
Because the piano has been drinking
And he's not my responsibility

The bouncer is this Sumo wrestler
Kinda cream puff casper milk toast
And the owner is just a mental midget
With the I.Q. of a fencepost
I'm going down, hang onto me, I'm going down
Watch me skate across an acre of linoleum
I know I can do it, I'm in total control
And the piano has been drinking
And he's embarassing me
The piano has been drinking, he raided his mini bar

The piano has been drinking
And the bar stools are all on fire
And all the newspapers were just fooling
And the ash-trays have retired
And I've got a feeling that the piano has been drinking
It's just a hunch
The piano has been drinking and he's going to lose his lunch
And the piano has been drinking
Not me, not me, The piano has been drinking not me



El piano ha estado bebiendo

Mi corbata está dormida

Y la banda se ha ido a Nueva York

La gramola tiene que ir a mear

Y la alfombra necesita un corte de pelo

Y el foco parece la fuga de una prisión

Porque el teléfono no tiene cigarrillos

Y la terraza se ha ido a ligar

Y el piano ha estado bebiendo

El piano ha estado bebiendo

Y todos los menús están helados

Y el iluminador está ciego de un ojo

Y no puede ver con el otro

Y el afinador de pianos lleva un audífono

Y se presentó con su madre

Y el piano ha estado bebiendo

El piano ha estado bebiendo

Y el matón sabe lucha japonesa

Pero es un enclenque cobarde

Y el dueño es un corto mental

Con el coeficiente de inteligencia del poste de una valla

Porque el piano ha estado bebiendo

El piano ha estado bebiendo

Y no puedes encontrar a tu camarera

Con un detector de radiactividad

Y ella te odia a ti y a tus amigos

Y no puedes conseguir tu trago sin ella

Y la taquilla está babeando

Y los taburetes están ardiendo

Y los periódicos están haciendo el tonto

Y los ceniceros están jubilados

Porque el piano ha estado bebiendo

El piano ha estado bebiendo

El piano ha estado bebiendo

No yo, no yo, no yo, no yo, no yo.

lunes, 3 de mayo de 2010

Discazos: "Cheap Thrills", de Janis Joplin con Big Brother & The Holding Company

a
Grandísimo disco de los comienzos de Janis Joplin. Junto a la ya formada Big Brother & The Holding Company, la Joplin interpreta desde canciones propias hasta versiones de clásicos como Summertime, logrando el disco más redondo de su carrera. A destacar la portada del genial Robert Crumb, por aquel entonces un ídolo de la contracultura gracias a sus comics bestialmente autobiográficos. En este blog tienes un amplio comentario del disco y un enlace de Mediafire para descargarlo. En esta página lo tienes en un enlace de Depositfiles, y en ésta en un enlace de Megaupload. A disfrutar.



01. Combination Of The Two
02. I Need A Man To Love
03. Summertime
04. Piece Of My Heart
05. Turtle Blues
06. Oh, Sweet Mary
07. Ball And Chain
08. Roadblock (Bonus)
09. Flower In The Sun (Bonus)
10. Catch Me Daddy (Live)
11. Magic Of Love (Live)